¿Cuál es el límite? ¿Cuánto podemos dar a pesar de nuestros problemas o circunstancias extremas? ¿Puede una enfermedad terminar definitivamente con nuestros sueños? ¿O podemos sobreponernos y seguir a la caza de nuestros mayores deseos?
La existencia sobre esta tierra trae aparejadas múltiples situaciones que se oponen a nuestros planes como grandes montañas difíciles de cruzar, sin embargo, está en nosotros la decisión de desplomarnos porque nos es imposible remontar tremendo escollo o comenzar a escalar, cueste lo que cueste.
Pero para muchos la situación se presenta doblemente complicada cuando el que “no puede” no es uno sino un hijo, una esposa o esposo, un padre o un amigo. ¿Cómo seguir cuando ese otro no quiere, no puede o no sabe?
Sería irrespetuoso dar un consejo cuando no me ha tocado ninguna situación extrema, ni en mi persona ni a personas cercanas, pero miro a mi alrededor y leo la vida y la experiencia de tantos que han decidido escalar esa montaña, a pesar de todas las circunstancias.
Entonces vemos historias de padres que se han repuesto a la pérdida de un hijo, hombres y mujeres que ante un diagnóstico poco favorable decidieron pelear la batalla sin saber si tienen ganada la guerra, personas sencillas que sin desearlo han trascendido porque amaron la vida por sobre todas las cosas. Seres humanos comunes que decidieron que no era momento para la depresión y la autodestrucción. Héroes anónimos de sus propias batallas.
Adrian Martín Vega es un joven de 11 años que vive en Málaga, España, y que nació con hidrocefalia y malformaciones congénitas en sus manos, pero que también, como la otra cara de la moneda, con un talento especial para la música y una voz que lo llevó a ser nominado, a menos de dos años de haber subido un video a Youtube, para los premios Grammy Latino.
Una voz particular, un carisma y sensibilidad único y una familia que creyó más en la capacidad artística de este niño malagueño que en sus limitaciones físicas.
Un ejemplo que nos dice mucho sobre cómo debemos enfrentar nuestros imposibles, porque en definitiva de eso se trata la vida: de luchar, de sufrir, de caer pero también de levantarnos y volver a luchar para conseguir lo que tanto deseamos.
Empezamos hoy el programa con una de las canciones que Adrian Martín Vega interpretó en un programa norteamericano. Con su estilo flamenco, Adrian espera por la resolución de los premios Grammy, aunque el premio mayor, de hacer lo ama, ya lo ganó.
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